domingo, 24 de agosto de 2008

Lo que se le puede hacer al amor


¿Qué se puede hacer con el amor?
Lo mejor olvidarlo,
tirarlo al cesto de la basura,
dejarlo ir como camión lleno,
quemarlo en la hoguera,
mandarlo a pagar impuestos.

El amor no sabe de libertad.

¿Qué se puede hacer con el amor?
Darle un batazo a la mala,
echarle los perros,
delatarlo ante la procuraduría de justicia,
encarcelarlo hasta que se muera de hambre.

El amor es celoso y compulsivo.

¿Qué se puede hacer con el amor?
Amordazarlo bien,
desecharlo por los caños,
violarlo en despoblado,
bañarlo con ácido de batería
hasta que quede reducido a nada

El amor no merece más
¿Qué se puede hacer con el amor'
Vaciarle la cacerola con el aceite de las papas fritas,
rogarle que tome clases de costura,
cortarle las alas,
mutilarle las manos,
abrirle los ojos y cerrarle la cartera
porque quien lo tiene está paralítico

Arturo Accio

lunes, 18 de agosto de 2008

Mis 3 palabras favoritas


Seguro que aún me faltan muchas palabras por explorar, experimentar y destruir... pero hasta el momento estas son las tres que más me gustan:

1. Silencio

2. Vacio

3. Obsesión

domingo, 17 de agosto de 2008

Felicidad


"La felicidad es no sentir el vacío que crece"
Arturo Accio
¿Entonces la felicidad es ignorar el inevitable, abrumador vacío que cada día nos consume, nos convierte, nos transforma?
Quizá el ser conscientes del vacío sea el primer paso para comenzar a llenarlo. Sabremos, por ejemplo, que hemos sido engañados por todas esas canciones de pop, literatura de Paulo Coehlo, y filosofía de "higiene mental". Nunca llenan el vacío, son sólo un tapón; es decir: nos impide ver el agujero, pero el vacío sigue ahí.
El vacío por otro lado puede no ser tan malo pues esconde la remota posibilidad de que exista algo dentro de nosotros que pueda llenarlo. Si así fuera, podríamos darle un sentido a nuestra terca existencia, a nuestra obstinada convicción de que el estar en el mundo tiene un propósito trascendente.
Lo más seguro es, muy a nuestro pesar, que ese vacío sea lo único cierto, lo único confiable, lo más honesto de nosotros mismos, nuestro verdadero yo. Nuestro yo que así debe, quiere, y va a permanecer.

viernes, 15 de agosto de 2008

Se ama más en el silencio que en el grito...



No somos héroes. Nunca lo fuimos. Intentar escribirte resulta en veces inútil, otras tantas imposible. No se puede contar lo que nunca fue, no podemos abrazar sueños que no nos tocaron, ni recordar aromas que no nos pertenecieron. Contarla se convierte en el último acto desesperado por aferrarnos, aferrarme a la idea de ti.


Todo es mentira, nada es cierto, incluso estas líneas. Cuando se piensa bien, con cuidado, lejos de los eufemismos y de las falsas imágenes que invariablemente todos nos dibujamos, se alcanza a presentir. Libres de los seguros, de las ideas que parecen inmutables y que en realidad sólo están ahí orgullosas, traicioneras, pendiendo de los hilos de nuestra mente; se puede sentir, casi palpar, casi tocar, la terrible pero aun así liberadora sensación del sin sentido. Cargamos tanto nuestras vidas con mentiras, con frases hechas, que terminamos por llenarnos, asquearnos de la nada.


Desesperados, angustiados por darle un dios a nuestras oraciones, un nombre a nuestros vacíos, nos encadenamos para darle un “hasta que la muerte los separe” a nuestra soledad. No hay certezas, no puede haberlas. Estamos solos.


Tu mirada impertinente. No pude salvarte, quiero que te quedes ahí, en el abismo.


miércoles, 13 de agosto de 2008

Cuando tengas ganas de morirte

Cuando tengas ganas de morirte esconde la cabeza bajo la almohada y cuenta cuatro mil borregos.
Quédate dos días sin comery veras que hermosa es la vida: carne, frijoles, pan.
Quédate sin mujer: verás.
Cuando tengas ganas de morirte no alborotes tanto: muérete y ya.

Jaime sabines